En principio la salud mental se enfocaba ciertamente en el tema de los trastornos mentales, haciendo énfasis el tema que aborda las capacidades de razonamiento; sin embargo, desde hace algunas décadas, se incluye el enfoque en el manejo de las emociones, partiendo de que forman parte integral del comportamiento y con ellas ayudamos a comprender cómo somos frente a situaciones puntuales.
Para tratar de descomponer el tema, Daniel Goleman plantea algunos elementos claves sobre inteligencia emocional, dentro de los cuales están:
- Autoconciencia emocional
- Autocontrol
- Habilidades sociales
- Empatía
- Automotivación
Dentro de este constructo, debemos incluir lo que representa la Adaptabilidad, habilidad que todos hemos visto florecer, de modo automático, en estos tiempos de pandemia.
Hemos pasado del libre tránsito, al encierro; de clases presenciales a educación virtual; de reuniones presenciales a reuniones virtuales; del trabajo al teletrabajo; así en el resto de nuestras actividades como compras, cumpleaños, bodas, etc.
Aun cuando nos adaptamos, lo hicimos bajo condiciones forzosas, sin embargo, la adaptabilidad, en el contexto de la inteligencia emocional, entrará más en juego en estos momentos de apertura gradual, partiendo de que es la capacidad de modificar el comportamiento y adaptarse a diferentes situaciones y personas de forma rápida y adecuada.
Así pues, el autocontrol y el resto de los elementos que componen la inteligencia emocional estarán en prueba en cada uno de nosotros en esta nueva normalidad para lo que hacemos las siguientes recomendaciones:
Basados en el conocimiento y comprensión de nuestros estados de ánimo (Autoconciencia emocional), debemos tratar de controlar nuestras emociones e impulsos (Autorregulación emocional), tratando de entender a los demás (Empatía) de modo que reciban de nosotros una respuesta adecuada en cualquier situación (Habilidades sociales) y que esta se convierta en un auto reconocimiento a nuestra mejor versión (Automotivación).
Ante el deseo reprimido de socializar y las capacidades desbordadas de las autoridades por mantener el control, ahora pues, más que nunca, nuestras emociones jugarán un papel protagónico en el porvenir, por lo que debemos hacer consciencia de nuestras respuestas ante las diversas situaciones que nos depara la nueva realidad y es que de ellas dependerá el desarrollo de una nueva sociedad y un nuevo estilo de vida si nuestro aspiracional se mantiene en la sana convivencia y la paz social.
Sandra Fernández. Sicóloga Clínica.
Es co-fundadora del Instituto Regional Psicoeducativo Resil, con sede en San Francisco de Macorís, provincia Duarte, República Dominicana. Tiene curso de posgrado en Gestión Educativa y Magister en Dirección Estratégica de Recursos Humanos. Posee además un doctorado en Criminología, área en la que ha acumulado vasta experiencia dado su vínculo y trabajo como directora Académica de la Academia Regional Penitenciaria (ARP), institución que opera desde el territorio nacional para Latinoamérica y el Caribe, y de su participación en el proceso de estructuración y puesta en funcionamiento de los programas de tratamiento para la rehabilitación y reinserción de personas privadas de libertad (PPL´s) del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria de República Dominicana. Es profesora para nivel de maestría, está certificada como facilitadora y tutora virtual y ha sido conferencista en numerosos eventos internacionales.